domingo, marzo 27

nº 534

Cuando entró, el aviso luminoso se expandía en el 533, la gorda de mirada hueca ignora que estamos allí desde hace rato, lejos en su vitrina traslucida, sumida en el ritmo de contar billetes, energía vibrante en toda la sala. De pie frente al cristal, rompiendo el cubo en donde está sujeta; abriendo sus fauses expele las únicas palabras que aprendió a decir: Siguiente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario